Que nuestra casa sea un espacio alegre, armónico, en el que todos nos sintamos cómodos, al que a todos nos apetezca venir…
Os contaba que este año quería seguir aprendiendo a simplificar. Porque nuestras vidas son lo suficientemente complejas, porque tenemos muchos estímulos y porque yo soy una persona inquieta a la que todo resulta interesante…
Y con ese ánimo, hemos estado pensando, qué es lo que realmente importa en nuestra casa. Para nosotros la clave de todo, lo más importante es que sea un espacio alegre, armónico, en el que todos nos sintamos cómodos, al que a todos nos apetezca venir.
Eso lo tenemos claro. Pero ahora que la lenteja se va haciendo más consciente, he pensado que era bueno concretar un poco más de cara a ella.
Por un lado para trasmitirle los valores que queremos vivir en casa. Pero también para transmitirle COHERENCIA.