Esta semana, para seguir con nuestro enero organizado, me había propuesto hacer una primera incursión a las rebajas y recoger los adornos de Navidad en casa.  En previsión, hace un par de días pregunté a María Gallay, amiga y súper organizadora profesional, para que me adelantara algunos consejos.

Después os cuento cómo recojo yo los adornos de Navidad en casa, pero antes os dejo con unos consejos de María para motivarnos en la recogida:

• Antes empiezas, antes acabas: La vida es muy complicada pero tener el árbol en el salón hasta abril no ayuda a sentirnos a gusto. No apetece guardarlo pero en cuanto lo quitas, es un alivio porque hay más espacio, se limpia mejor y ya no está pendiente.
• Lógica además de magia: Papá Noel y los Reyes también acumulan, y no solo juguetes. Traen mucho pero no se llevan nada. Aplicar la lógica depende de nosotros. Hay piezas básicas que son “fondo de Belén” pero otras se deterioran, ya no las utilizamos o sabemos que no las volveremos a aprovechar. Si son “obras de arte” de los niños, a la caja de los recuerdos. Si son “por si acaso”, pensemos que no es necesario tener 3 atrezzos para el árbol.
• Es un hecho, Navidad es una vez al año: Por más que la Navidad nos guste y que suponga un momento ideal para la reunión familiar, es algo que sucede una vez al año y no más. Cada uno puede adornar su casa como quieras y con todo lo que le guste, pero sin colapsar el espacio disponible para el almacenaje de lo que necesita la familia para todo el año. Vivimos, trabajamos, viajamos, hacemos deporte, jugamos, leemos cada día de cada una de las 52 semanas del año; no hay excusa para que lo de Navidad ocupe la mayor parte del trastero/altillo/armario. Simplificar es un beneficio para la vida diaria de la familia.
• La Navidad somos todos: Para decorar, disfrutar y celebrar se apuntan todos. Para recoger y guardar… ya sabemos. Y sabemos también que solemos ocuparnos algunos porque lo hacemos más rápido (y en ese rato que podemos), pero es importante incluir a la familia en la tarea. Porque hay que estar para colaborar en la fiesta pero también en el proceso que lleva. Quien no ve este proceso, no lo registra, no sabe cómo hacerlo ni lo valora.

Consejos para ordenar los adornos de Navidad

Así que, siguiendo los consejos de María, aunque nos daba mucha pereza, hoy cuando estaban los niños durmiendo la siesta, nos he puesto con ello.

Mientras lo hacía, he estado repasando qué trucos tengo para que estén bien ordenados, no se estropeen y no se ensucien. Porque como dice María “de cómo guardemos las luces/las bolsas/las figuras este enero dependerá lo bien que las encontremos en diciembre”.

• Lo primero de todo, paso el polvo a las distintas piezas antes de guardarlas.
• Después, las agrupo entre sí. Las luces por un lado, las piezas de nacimiento por otro, las piezas del árbol juntas, etc.
• En tercer lugar, las voy colocando: 
  • Las piezas del nacimiento, si son de cerámica, hay que guardarlas con mucho cariño para que no se rompan. Lo ideal, en la caja en la que venían. Si no la tenéis con papel burbuja y, si tampoco tenéis, pues bien envueltas en papel de periódico y con mucho mucho cuidado.

• Las piezas del árbol, para que sea más fácil montarlo el año que viene, os recomiendo guardar cada fila o altura o tipo de hoja en una bolsita de plástico. Además cogerán menos polvo.

• Las luces, si se lían mucho, las podéis enrollar alrededor de un cartón, tubo de cartón del papel de cocina o un trozo de algún papel gordo doblado. Así, el año que viene estarán listas para colgarlas y lucirlas.

• Y por último, las guardo en un arcón que no necesitamos abrir a lo largo del año. De hecho, lo ideal es guardarlas todas juntas si caben y en algún sitio cerrado para que no cojan polvo mientras que están esperando a que las volvamos a sacar las Navidades siguientes.

Y vosotros ¿cómo lleváis la tarea? ¿algún truco que queráis compartir? Espero que el post os haya ayudado para hacerlo cuanto antes y para que en diciembre de este año os lo encontréis todo limpio y ordenado. ¡Listo para volverlo a poner!