Yo creo que somos más los que cada día nos preocupamos por la alimentación. Por tener una alimentación saludable. Yo, desde luego, lo hago. En casa intentamos comer variado y completo (gracias a nuestro súper planificador del menú semanal), y cada vez miro más las etiquetas, etc. Pero la verdad, tampoco me obsesiono. Sé que aunque algunos días nos pasemos y comamos de más o cosas más grasientas o azucaradas seguimos teniendo una alimentación variada y buena, bastante mejor que la de nuestros abuelos en la postguerra (a parte de la escasez, en esa época se cocinaba casi todo con manteca de cerdo) e incluso, más variada si me apuras que la de nuestros padres (mi madre, de familia numerosa, asegura que de pequeña comía casi a diario cocido, que es un plato muy completo y muy sano pero aún así, algún día pescadito…)
Pero sí creo que todo lo que hagamos por comer mejor redundará en nuestra salud y calidad de vida. Y para ello es importante formarnos e informarnos. Y si podemos, desde pequeñitos.