Hoy ha sido un día muy especial. Seguramente, de los que se recuerdan toda la vida. Hoy, hemos celebrado el día del padre de forma diferente.
Hace 4 días nació nuestra pequeña. Una gordita, feliciana y pachorra que no podemos dejar de mirar. Sus pucheros, sus muecas, su cara de paz absoluta mientras que duerme, sus atisbos de sonrisa. Todo parece magia, fruto de un pequeño milagro.
Hemos salido por primera vez de casa para celebrar un día tan importante. Y sí, tarde, mojados por la lluvia, un simple bocata y una cocacola… pero nos ha parecido la comida más maravillosa del mundo. Porque nuestra pequeñaja estaba ahí en el carrito, quieta a nuestro lado, durmiendo, haciéndonos sentir de forma distinta y especial este día.
Sin duda, el mejor regalo del día del padre, es ser padre.
Querida Rita: Es tan bonito que estén llegando éstos retoños a vuestras vidas! Y… precioso por ser todas a la vez! Me alegro muchísimo por ti y por tu familia. Te doy todas mis felicitaciones. Deseo que los veamos crecer a todos, Seguro que iremos viendo ” cositas” a través de tu página, Muchos besos, ! que te llene de alegrías!
Muchísimas gracias Chelo. Tienes razón: ¡Qué época tan especial! y qué ganas de seguir viendo cómo crecen juntos. Un beso muy fuerte.