Viajar a Londres apetece siempre . Y yo he tenido la suerte de poder ir unos días a disfrutar con Andrés de esta maravillosa ciudad. Por eso he tenido el blog un poco olvidado 🙂
El viaje a Londres es lo que yo llamo un viaje capricho. Me explico: como es un destino que ya conozco, no siento la obligación de tener que ir a ver los monumentos típicos de la ciudad. Ya conozco el Big Ben y el Parlamento, la abadía de Westmister, Trafalgar Square, Picadilly Circus … Puedo ir a andar, a descubrir, a observar a no planificar y a dejar que la ciudad me sorprenda.
¿Qué hacer en Londres?
O igual deberíamos mejor decir ¿qué no hacer en Londres? porque realmente, la ciudad del Tamesis ofrece de todo. Nosotros fuimos sin ningún plan ni sugerencia previa. Nos hemos dejado llevar por el ritmo de la ciudad y nos ha salido redondo. Y eso que el tiempo no ha ayudado ¡qué frío y qué lluvia! Os cuento alguna de las cosas que hemos hecho por si tenéis pensado ir:
Compras de ropa para chico en Jermin Street. En esta calle se concentran las camiserías, zapaterías y barberías más clásicas de Londres. Aunque parezca mentira, se pueden encontrar cosas a muy buen precio, como 5 camisas de trabajo de un magnífico algodón por 120. ¡Nada mal!
Comida en el Soho. Este barrio es encantador, animado, bonito, con tiendas y restaurantes chulos Nosotros descubrimos Bills, un restaurante con comida rica y bien de precio y un ambientazo.
Sunday Roast en Covent Garden. Una de las comidas tradicionales inglesas (a parte del fish&chips). ¡Qué mejor que un auténtico pub inglés para degustar esta comida!. Como Lamb & Flag.
Clásico Dry Martini o Gin & Tonic en My Fair, ¿dónde mejor que en Londres para disfrutar de esta mítica bebida? Lo tomamos en Dukes Hotel. Un hotel boutique con un bar en el que te imaginas a los señores con bigotes largos y peinados y las señoras jugando al bridge. Eso sí, no regalan la copita 😉
Visita a alguno de los míticos mercadillos. El más conocido es Portobello pero hay muchos que merecen la pena. Nosotros visitamos el de Petticoat Lane y Brick Lane, con ropa de marca y vintage muy interesante. Además, hay una parte cubierta en Brick Lane con puestos de comida de todo el mundo. Una forma barata y animada de comer.
Afternoon tea, el classico té inglés. Si te gusta el té, un gran plan ¡yo disfruté como una enana! Eso sí, mejor ir sin comer porque el te se acompaña con sandwiches, scones y dulces.
¡¡Un gran viaje!! Ya os enseñaré algunas de mis adquisiciones…